“No solo un método para conseguir el orden en el hogar, sino una manera de descubrirte a ti mismo y conocer lo que te hace feliz.”
En este caso, parece ser que la meta que conseguiremos a raíz del método de Marie Kondo será el del orden, no obstante con mi ayuda conseguirás mucho más, conseguirás una transformación de tu hogar y de tu vida. Una vez hecha la reforma a medida, serás una persona ordenada, te conocerás a ti mismo/a y tu estilo de vida ideal, serás consciente de tus pertenencias y cuáles son aquellas cosas que te hacen feliz. Y además conseguirás tener un hogar adaptado a tus necesidades donde todo luzca todo como el primer día, porque cada objeto tendrá su lugar.
Antes de llevar a cabo cualquier reforma, insisto a mis clientes y clientas que tienen que hacer varias reflexiones. Existen dos formas de llegar a tu estilo de vida ideal, la primera es marcarte metas ambiciosas, y la segunda es elegir aquellos objetos que te generen felicidad.
1.- Márcate metas e imagina cuál es tu estilo de vida ideal
“Si realmente quieres orden en tu hogar, quieres hacer una reforma, quieres mudarte, cualquier cambio tiene un por qué”
La única forma de que consigas tu meta es agarrarte fuerte a eso que realmente quieres conseguir. Por eso vamos a realizar un ejercicio, imagínate cuál es tu vida ideal.
Pregúntate a ti mismo:
- ¿Para qué quiero organizarme?
- ¿Cómo me imagino mi vida ideal?
- ¿Para qué he decidido cambiar (de casa, hacer una reformar, convertirme en una persona ordenada…)?
“Para mantenerte motivado, es importante tener una imagen clara de cuál es tu meta.”
¿Cómo dibujo esa meta?
Tu meta no debe ser vaga, por ejemplo, “Solo quiero ser organizado,” o, “Quiero aprender a organizarme” no son suficientes, la clave es ser lo más específico posible.
“Con las metas la clave es ser lo más específico/a posible”
Te debes de imaginar a ti mismo viviendo esa vida ideal que deseas. Si te resulta difícil imaginarte cómo sería tu vida ideal, piensa en aquellas cosas que te gustaría hacer dentro de esa habitación y escríbelo en una hoja de papel.
“Para algunas personas, su estilo de vida se puede basar en meditar antes de ir a dormir, o para otras es tomar un café por la mañana en su taza favorita…”
Otro consejo en caso de reformas y mudanzas es pensar que es lo que quieres conseguir con el cambio. Tener la casa de tus sueños adaptada para ti y tu familia donde tengáis sitio en la cocina para estar charlando después de comer, tener sitio en casa para reunirte con familiares y amigos… en definitiva, soñar con una vida en familia donde puedas disfrutar y sentirte feliz.
“Busca inspiración, colecciona fotos de casas que te gustan, para que puedas volver a ellas para inspirarte cuando lo desees. Recuerda que el primer paso para organizarte es imaginar tu vida ideal.”
2.- Elegir aquellas cosas que te generan la felicidad
Decidir qué te genera “felicidad” es más fácil de lo que parece. En el Método KonMari, vamos a distinguir entre lo que vas a guardar y lo que vas a descartar basándote en la felicidad que te produce. Lo interesante en este punto es el enfocarse en aquello que deseas quedarte en tu vida, en lugar de aquello que quieras descartar. De esta manera te conocerás mejor a ti mismo/a y elegirás aquellos objetos que crees que son indispensables. Por ello, antes de llevar a cabo cualquier reforma es importante centrarnos en estos aspectos.
“Se trata de darle un enfoque positivo y centrarnos en aquellas cosas que queremos conservar en vez de en enfocarnos en aquellas que queremos tirar”
3.- Expresa gratitud
Cuando decides que vas a deshacerte de algo que ya no te hace feliz, debes decirle “gracias” antes de decirle “adiós”.
Cada pertenencia está en tu vida por una razón. Tuvo un propósito y deberías reconocer ese propósito. Por ejemplo, si tienes ropa que compraste, pero nunca usaste, ¡no te preocupes! A lo mejor te produjeron felicidad cuando los compraste o te enseñaron qué estilo de ropa no te favorece. Por esta razón, antes de deshacerte de algo, has de agradecer por la razón en la que estuvo en tu vida.
Di “Gracias por producirme felicidad cuando te compré” o “Gracias por enseñarme lo que sí se ve bien en mí.” Puedes darle las gracias en voz alta o, si lo prefieres, en silencio desde tu corazón.
Al deshacerte de cosas siendo agradecido, comienzas a aprender lo que realmente es importante para ti. Además, te sentirás menos culpable al deshacerte de algo y verás que predomina el orden en tu hogar. Cuando decidas deshacerte de algo puedes donarlo o venderlo en lugar de tirarlo. Deshazte de tus cosas de una manera que te brinde felicidad.
¡Cuéntame que es lo que a ti te produce felicidad! ¿No crees que en esta vida dar las gracias es necesario?
De esta manera, te conocerás mejor a ti mismo/a, solo tendrás en casa objetos que te generen felicidad y tendrás claro cuál es el estilo ideal que quieres seguir para ser feliz.